El tercer ojo es una herramienta muy poderosa del alma para ver, sentir y oir las realidades de frecuencia mas altas.
Cuando la energía cósmica fluye densamente, el tercer ojo se activa.
Al momento en que se activa el tercer ojo, sentimos una sensación de comezón o de ser jalados en la región de la frente.
Empezamos a ver reflejos de varios colores girando alrededor nuestro.
Escuchamos murmullos, sonido de caminar.
En este punto sentimos como estuvieramos viajando en un tunel obscuro.
Cuando el cuerpo etéreo obtiene suficiente energía cósmica a través de más y más meditación nuestro tercer ojo se perfecciona.
Aquí es donde percibimos claras visiones de este y otros planos.
En la perfección del Tercer Ojo,
“Vemos” tantas cosas claras como el cristal, más que con la visión física.
' vemos ' otras realidades de la frecuencia. ' vemos ' las cosas, que no están presentes en el reino de cinco sentidos. ' sentimos ' tan muchas cosas, que no podemos expresar con las palabras. ' oímos ' voces, sonidos o sonidos internos de instrumentos de otras frecuencias. ' vemos ' los amos que no están allí físicamente con nosotros. ` vemos ' amos en una forma física, como los sabemos. Después de más meditación, comenzamos ' a ver ' el amo como una ' luz brillante '.
Aún viendo la Luz Brillante, sentimos la identidad del Maestro.
Podemos “oir” los mensajes de los Maestros.
Sentimos movernos en un tunel y finalmente emerger con la luz.
A través de la experiencia del Tercer Ojo sabemos que
Podemos tener respuestas a todos nuestros problemas a través de
Mensajes de los Maestros
O “viendo” realidades de otras frecuencias, o bien, a manera de sentimiento.
Con esto,
Nuestras acciones cambiarán
Nuestras creencias cambiarán
Nuestro entendimiento cambiará.
Después de la experiencia del Tercer Ojo, encontramos cambios en nuestra percepción del plano físico.
Ahora conozcamos la otra herramienta del ser, el Cuerpo Astral
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